Mi gran sueño fue siempre cepillarme a un negro. Como en el país son tan escasos, fue siempre eso, un sueño. Pero hace un tiempo leí en la prensa que barcos de la Unitas estarían en Valparaíso y eso me trastornó. Creo que ahí mismo empecé a calentarme. Me pasé películas y me veía atravesada por un bruto de esos como los de la NBA norteamericana. Soy de Santiago, por lo tanto desplazarme a la región no era problema. Soy casada, afortunadamente con un hombre que me adora. En nuestros juegos eróticos siempre hemos planteado situaciones casi imposibles de realizar, como por ejemplo la que les describo. El sabe todo de mí. Siempre me dice que soy más que caliente y le gusta..