Dicen que las bodas son para dos cosas, celebrar el compromiso de dos personas, y celebrar la soltería del resto de los invitados. Lo interesante en lo que les voy a contar es que yo no estaba soltera, y aun así celebré mi falsa soltería. Mi nombre es Nicole, y estoy en una relación desde hace unos cinco años, y estoy comprometida hace unos tres meses con Francisco. No tengo dudas que Francisco es el amor de mi vida, desde el momento que nos conocimos caí perdidamente enamorada, incluso cuando llevábamos pocos meses de relación me fue infiel, infidelidad que perdone, y desde entonces su actitud cambió rotundamente comprometiéndose a la relación.