Dejé que un travesti me follara por primera vez y no voy a mentir, fue una de las mejores experiencias que he tenido. Mi nombre es Ronaldo y les voy a contar esta loca experiencia que tuve donde follé por primera vez. Soy un hombre de 36 años felizmente casado con una hermosa mujer. Pero tengo un secreto, me gusta engañar a mi mujer con prostitutas trans, así es, me encanta una travesti muy caliente y traviesa, me pone locamente cachondo.
Y a veces termino engañando a mi esposa, le digo que voy a llegar tarde al trabajo. Pero en realidad voy al motel con prostitutas trans y tengo sexo caliente. Me gusta penetrar a estas zorras, me encanta penetrar el culo de una puta trans. Realmente es una de las cosas que más me gusta hacer. Pero un día acabé sorprendiéndome con Luna, mi prostituta favorita, una preciosa morena de enormes pechos con silicona, un culo perfecto con marca de biquini. Es la travesti de mis sueños y al menos una vez a la semana nos juntamos para tener buen sexo.
Y esta última vez me terminó sorprendiendo, como mi mujer había viajado terminé llevándola a casa. Donde pagué más para que ella se quedara toda la noche y durmiera conmigo allí. Como ya éramos íntimos, ella aceptó, así que llegamos a la casa y como me iba a poder sentir cómoda con Luna, agarré un tequila y empezamos a beber. Me emborraché mucho y Luna también, y durante el sexo terminé teniendo una sorpresa, estaba teniendo sexo oral y de repente la traviesa borracha me metió el dedo en el culo. Salté, pero ella me detuvo y continuó colocando sus dedos.
Le pedí que se detuviera, pero la trans Luna era mucho más fuerte que yo y seguía metiéndose con todo. Y se estaba poniendo lindo porque al mismo tiempo ella acariciaba mi polla excitándome más y más. Nunca antes había tenido una experiencia así y la dejé continuar. Recuerdo que cerré los ojos porque estaba delicioso, pero luego de la nada algo mucho más grande me entró por el culo, ella dijo que metió más dedos y fue penetrante y la dejé.
Se había puesto lubricante y se estaba poniendo más y más caliente. Luego cuando abrí los ojos la vi penetrando el pene, traté de salir, pero como dije era mucho más fuerte y siguió. Me pidió que disfrutara del momento y acabé relajándome y empezó a hacerme una paja mientras me penetraba el culo. Como resultado de eso tuve el mejor orgasmo de mi vida y me corrí intensamente con este enorme pene moviéndose dentro y fuera de mi culo.
Y por primera vez tuve sexo anal diferente donde recibí un pene en el culo. Una cosa maravillosa, dormimos y al día siguiente me desperté temprano, y le pedí que lo hiciera de nuevo. Y por segunda vez dejé que me penetrara el culo, me gustó mucho y me fui muy contenta al trabajo. Pero confieso que me dolió un poco el trasero, pero valió mucho la pena. Recomiendo encarecidamente esta aventura sexual, muy sabrosa y ya quiero volver a hacerlo.
