Hola, estoy aquí hoy para compartir una historia muy desagradable que sucedió entre mis jefes y yo. Soy un joven pasante de apenas 20 años. Y hago una pasantía en un bufete de abogados de 2 viejos socios muy ricos y sucios. Mi historia de hoy tiene que ver con ellos, fue mi primer trío, el cual hice con estos dos pervertidos después del trabajo.
Soy una rubia muy guapa y llamo mucho la atención. También estoy saliendo con un hombre maravilloso que me quiere mucho. Yo también lo amo, pero amo aún más mi trabajo y mi futura carrera como abogado en la que quiero convertirme. Y por eso terminé teniendo que hacer algunos trabajos extra para llegar a la cima.
Y para convertirme en un gran abogado, recientemente tuve que hacer una audición con mis empleadores. Me llamaron a su oficina y me preguntaron si quería ser abogado de la empresa ganando un buen salario. Acepté de inmediato, pero me dijeron que tendría que demostrar que merecía ese ascenso. Y dije que haría cualquier cosa para que me contrataran cuando me graduara de la universidad.
Tuve mi primer trío en el trabajo
Así que les pregunté qué era y me dijeron que sería algo realmente bueno. Un muy buen sexo después del trabajo, me sorprendió y me dieron ganas de salir corriendo de allí. Porque no quería tener sexo con esos dos bastardos feos. Pero luego comencé a pensar en lo bueno que sería ser abogado en esa empresa. Iba a ganar mucho dinero e iba a ser un abogado de renombre. Así que me tragué las lágrimas y acepté la propuesta.
Llegó el final del día, todos se fueron, excepto yo y mis jefes. Fui a su habitación y los cabrones comenzaron a quitarse la ropa y mostrar los penes enormes y duros que tienen. Me daba mucha vergüenza quitarme la ropa y empezaron a besarme y chuparme por todas partes. Luego me agarraron violentamente y empezaron a penetrar mi coño. Hasta que uno de ellos a la vez me penetró el culo. Grité fuerte de dolor y amordazaron mi boca.
Luego continuaron follándome el coño y el culo al mismo tiempo. Me rompieron porque me lastimaron todo el culo dejándolo desollado. Y mi coño estaba en llamas, no quería que mi primer trío fuera así, pero ahora me contrataron como socia en la empresa que tanto deseaba. Y confieso que valió la pena y que lo volvería a hacer con esos viejos cabrones.