Eran las 8 de la mañana y me despertó un mensaje de móvil: Nena, gracias por decidirte ayer. Irá a las 12h una amiga a llevarte de compras y si quieres y la aceptas se quedará unos días contigo para enseñarte todo lo que haga falta. Confía en ella. Espero que os hagáis buenas amigas. Nacho.
¿Era cierto o lo estaba soñando? Un rato más tarde volví a leer el mensaje, no lo estaba soñando, y empecé a notar el culo ocupado por el plug. Me gusta sentirlo, me movía en la cama para notarlo. Empecé a recordar toda la noche anterior y como nacho me hizo suya. Me gustaba la idea, dudaba que fuera a estar a su altura, pero me apetecía ofrecerme y sentirme la princesa de alguien. Me volví a quedar dormida.