Me llamo Seba, tengo 20 y este es el segundo año viviendo con mi tía por motivos de estudio. Tuve que irme de mi hogar para venir a estudiar a Santiago la carrera que quería, a pesar de estar lejos mi tía siempre se encarga de hacerme sentir como en casa.
Es una mujer divorciada de hace años, y sus 2 hijos que vivían con ella se fueron de la casa apenas consiguieron trabajo por lo que soy su única compañía; mide algo así como 1.70, pelirroja, blanca de piel, unos pechos grandes que siempre que va con poca ropa me dejan acalorado y un lindo trasero firme y redondo.
Tiene algo así como 50 años pero es típica señora buenorra que aparenta 30 (nadie sabe como lo hace). Nuestra relación siempre ha sido como de familia, sin embargo hay momentos en que me deja totalmente descolocado, como cuando saliendo de la ducha anda solo con ropa interior por la casa, en esos momentos me gana la calentura y tengo que llamar a mi novia para desahogarme.
Me considero un chico demasiado caliente por lo que por lo menos durante el año pasado, necesitaba frecuentemente de la Cata (mi novia) para regular mis ganas, pero andaba todo bien, tiraba harto, había buena onda con mi tía y me estaba yendo bien en la U. Eso hasta el inicio de este año.
A inicios del 2023 ocurriría algo que me dejaría como ahogándome en un vaso con agua, con la Cata habíamos terminado. Además de la pena y todo lo que conllevaba terminar una relación, había algo que me preocupaba más que todo, no poder tirar. Al inicio aguante bien, pero sabía que tarde o temprano iba a enloquecer (aprovecho de mencionar que sigo la corriente de nofap por lo que no me masturbo para satisfacerme).
Pasó el mes y no había tenido acción ahí abajo, por lo que cada día me sentía más jodidamente caliente, tenía sueños sexuales, fantaseaba despierto, andaba todo el día con una maldita erección abajo y vivir con mi tía voluptuosa no ayudaba nada. La gota que rebalso el vaso ocurrió al 2do mes sin tener relaciones, como se imaginarán al segundo mes ya parecía un puto perro en celo, por lo que un día decidí salir a la disco a carretear con unos amigos.
Antes de partir voy a hablar con mi tía para decirle que no me espere despierta porque yo llegaría tarde, a lo que ella me dice que no tenía ningún problema que lo pase bien y que me cuide, sin embargo me percaté que la casa estaba más arreglada que de costumbre y ella igual estaba vestida un poco inusual (escote provocador) por lo que le pregunté que a qué se debía, ella me dijo que justo tenía a un amigo invitado a la casa, a lo que yo bromeé diciendo que use protección y que la pase bien, ella se río y dijo ay no seas tonto si es solo un amigo, a lo que nos reímos y luego me fui.
Me junte con los chicos y llegamos a la disco, vacilamos un poco y pasadas las horas me topo con la Cata bailando, a lo que unimos los grupos y nos pusimos a carretear juntos (tonto lo sé) ya un poco ebrio y mas caliente que la mierda, nos empezamos a comer con la Cata en la disco, sabía que estaba mal pero no me podía detener, ella sintió la erección que tenía y me empezó a perrear con su trasero demasiado pegado en mi entrepierna. Mi mejor amigo Benja, vio la situación y gracias a Dios fue en mi rescate, me sacó a la calle con los chicos y nos fumamos un cigarro, ahí intentó que yo abriera los ojos y me diera cuenta diciendo que no me metiera de nuevo con esa mina, que estaba loca y que mejor nos fuéramos porque no estaba bien que me metiera de nuevo con ella. Ahí me di cuenta, accedí y le di las gracias por hacérmelo ver. Pedí un Uber y me fui a la casa tipo 2 de la mañana porque ya estaba un poco cansado.
Llego a la casa, mas o menos mareado y caliente por lo sucedido, pero igual intento entrar lo más silencioso posible para no molestar. Entro y estaba todo apagado, pero noto que hay cosas de alguien más en la sala, comienzo a subir por las escaleras y en lo que voy subiendo silenciosamente, escucho unos ruidos extraños viniendo de arriba, sigo subiendo y los ruidos se escuchan cada vez más fuerte, eran unos gemidos y una cama rechinando a más no poder, cuando ya logro identificar que era el ruido, mi pene empieza a levantarse sin yo querer.
Tengo que aclarar que para entrar a mi habitación debo pasar antes por enfrente de la habitación de mi tía, entonces mientras más avanzo, escucho más claramente los gemidos, estaba a dos pasos y se escuchaba !ah ah sii ah si si más aaahh ah ohh así sigue ahh! Entonces me percato que su puerta estaba completamente abierta, a lo que dije -mierdaa como lo hago para pasar a mi pieza sin que me vean- entonces me armé de valor y seguí avanzando hasta quedar completamente frente a la habitación y ahí, mi tía montando a un sujeto.
Quedé atónito viendo como a aquella dulce mujer que siempre veo en casa la estaban partiendo, no pude seguir avanzando quedé hipnotizado al ver como se movía su voluptuoso cuerpo todo sudado. En eso que me quedo parado viendo, ella (que estaba en una posición de cara a la puerta) me ve ahí parado, a lo que para de gemir por un segundo, me mira a los ojos y comienza a jadear (su acompañante aún no me veía por lo que le seguía dando) sonríe y coloca una cara de goce total mientras empieza a gritar con más fuerza, empieza a cabalgar más bruscamente y llevaba sus manos a la cabeza mientras me veía a los ojos como si lo estuviera disfrutando.
Baja las manos para agarrarse las tetas y abre la boca por la que comienza a babear, verla así, disfrutando un pene con esa cara de puta me excito tanto que pensé que eyacularía sin siquiera tocarme. Entonces me quedé unos segundos viendo como sus tetas rebotaban y como el tipo le daba cada vez más fuertemente. Hasta que cambio de posición y ahora me daba la espalda, el hombre con el que estaba acomodó su pene en su ano y empezó a darle muy rápido y fuerte como un animal. Quedé ahí viendo como ese culo enorme rebotaba hasta que pum, se detuvo y llenándole el ano de semen hasta rebosarlo se quedaron ahí unos segundos gimiendo los dos. Entonces avergonzado por no tener la fuerza para no ver eso, seguí con mi camino y me encerré en mi habitación. Fue la noche más larga de mi vida, me costó conciliar el sueño pero lo conseguí y sin masturbarme.
Al otro día desperté tarde, sin creer lo que había pasado. Bajé y mi tía no estaba pero estaba el almuerzo listo; almorcé, fui a la universidad en la tarde y llegué tipo 20 h a la casa. Ahí estaba ella, cocinando, yo me senté en el comedor y minutos más tarde se sentó al lado mío. «Así que… me viste anoche» me dijo ella rompiendo el silencio, «desafortunadamente» agregué yo.
Otro silencio incómodo. Luego prosiguió ella diciendo «en verdad lo siento, pero debes entender que estoy tan sola en esta casa y también soy persona, nunca más sucederá, tendré más cuidado lo prometo» a lo que yo le dije que estuviera tranquila, que la entendía y que era algo totalmente normal pero que se pudo haber detenido o algo al verme, entonces ella me dice «detenerme???!! Justo en el clímax?! Jajaja ni loca, además seguro tú igual te entretuviste solo en tu pieza» agrego en forma burlesca, a lo que le respondo que no me masturbaba y que una vieja gorda no me excitaba para nada (bromeando).
Entonces ella (continuando con la broma) se acerca demasiado a mi cara y cambiando a un tono coqueto dice algo como «entonces menos mal que esta vieja gorda no te excite para nada, pues tendríamos un problema se así fuera, debes recordar que podría ser tu madre» me lo dice casi tan cerca de mis labios como susurrándolo, se quedó un segundo tan cerca que juré que me besaría, entonces se ríe y se aparta diciendo «era broma, era broma,, por cierto tienes una erección» miro abajo y me pongo rojo de la vergüenza, por lo que digo que no me siga molestando más mientras me voy a mi habitación.
Ya habían pasado un poco más de 2 meses sin coger y estaba hirviendo de calentura, además que mi tía me estaba provocando fue imposible dormir esa noche. Por lo que cegado por mis hormonas hice algo que para el que siga leyendo hasta aquí no debería hacer nunca jamás. (A día de hoy me avergüenzo de hacerlo).
Esperé a que fueran las 3 am. Y sin poder aguantar más las ganas de satisfacer mis necesidades, fui silenciosamente a la habitación de mi tía (tiene el sueño muy pesado por lo que sabía que no despertaría) abrí las sábanas y usaba un pijama traslúcido que le dejaba ver todo, ya no aguantaba más, mi pene estaba tan grande que pensé que explotaría. Me puse encima de ella e introduje mi pene suavemente en su vagina rasurada, y empecé a moverme. Agarré sus tetas y le besaba los labios mientras me movía, ah se sentía tan bien, su vagina estaba tan calentita y humeda, cada vez lo hacía más fuerte, no me podía controlar, no podía creer que le estaba dando a semejante mujer.
De pronto empezó a gemir, por lo que pensé que podría despertar, me apresuré para sacar el pito y eyacular fuera, pero cuando lo estaba sacando, ella me amarra con sus piernas y me dice,» te vas luego de dejarme tan caliente? Eres un pendejo malo» a lo que me empuja hacía ella y me empieza a comer la boca mientras movía su cintura y yo le daba con más fuerza. Ella se saca las tetas y me dice que se las chupe, yo obedezco y mientras estaba ahí chupándole las tetas y sacando y metiendo sentía que estaba tan excitado que cada vez ingresaba mi pene más al fondo, ella decía «ay ah cresta, así sigue así, ahh más adentro ah» y yo le decía eres una puta de mierda, no puedes estar tan rica. Cambiamos de posición y ahora ella estaba arriba, estuvo ahí cabalgándome y babeando encima de sus tetas como por media hora creo, hasta que me dijo ay para me vengo se empezó a tocar la concha y cayó encima mío como retorciéndose y con pequeños espasmos me dio un beso tan rico que sentía que me venía, entonces le dije que me la chupara para llenarle la cara de moco.
Ella bajó a mi pene y empezó a hacer su magia, era claro que tenía una maestría chupando pico porque nunca nadie me lo había chupado tan bien, en un punto pasa su lengua por mi glande a lo que yo digo la concha-de-tu-madre, y todo ese semen acumulado por meses explota en su cara, no paraba de salir y salir, se veía como una verdadera puta con su cara llena de semen y tragando todo el que seguía saliendo. Ahí subió y me dijo la última vez pendejo, se limpió la cara y nos comimos a besos toda la noche, claro luego seguimos cogiendo más violentamente.
Nuestra relación cambió totalmente, ella dijo que sería la última vez pero desde entonces es ella la que inicia nuestros encuentros. Ahora no podemos parar de coger, no habría pensado que era una adicta al sexo mi tía. Cada vez me pide cosas más obscenas, hay veces que la dejo llena de moretones y rasguños. La última noche que lo hicimos se orino mientras se la metía. Ahora anda casi siempre desnuda por la casa para provocarme y cuando podemos tiramos rico.
Estábamos pensando subir videos, pero es ella la de la idea, piensa que puede ganar mucha plata con su cuerpo, será buena idea gente?
Bueno hasta aquí, quizás después suba una actualización de como me va con este nuevo estilo de vida.
Adiós.