Sexting con corridas

Lo prometido es deuda.

Nos conocimos enredando por la nube, tras unos primeros saludos donde despejamos que ninguno de los dos éramos una máquina ni había segundas intenciones, que éramos un hombre y una mujer con ganas de conocerse, conversamos casi todos los días durante medio año, me pareció que era y es una mujer excepciona y como ella misma se define: Verdadera y Valiente. No dejaba de sorprenderme, con las cosas muy claras, llegamos a intimar, surgió la atracción y el deseo, al menos por mi parte, y en ese medio año tuvimos encuentros por chat para mi muy intensos y placenteros, no sólo sexuales como en la siguiente conversación:

Las conversaciones están adaptadas para darle continuidad y sentido como conversación para lo que he añadido algunas cosas que no dijimos o que lo hicimos en otras conversaciones.

Llevábamos ya varios minutos hablando en el chat cuando ella dijo:

A: Estando sola con mi pareja, sexo es lo que tendría a cualquier hora.

W: Nunca se lo había escuchado a una mujer, coincido, dejarnos llevar por los sentidos, follar hasta sacar todo el fuego interior.

A: Desde luego tú vales mucho como amante. Habría que vivir una pasión, aunque fuese una vez en la vida. Seguimos hasta el final con todas la consecuencias.

W: Me encendiste aquella noche de verano y sigue ardiendo la llama que alimentas con tus sueños: “Mi sueño para una noche de verano está en tus manos, en una mirada, en unos labios, en tu miembro viril dentro de mi.”

A: El romanticismo tiene mucho de pasional, incluso más que la atracción física, porque lo primero tiene de lo segundo la atracción externa no satisfecha y la atracción interna, la de los sentimientos que se suman a los sentidos. Aquí estamos los dos con ganas de guerra.

W: Hagamos el amor y no la guerra.

A: Hacer el amor es abrazar y follar a la vez, una rima maravillosa para los verdaderos amantes.

W: Abrazar con deseo es el principio de follar.

A: Hace falta tiempo para hacer el amor y todo un arte para hacerlo salvajemente. Con el dildo. Me apetece.

W: Pero el sexo entre dos también

A: Claro, todo junto. Él me lo pone y luego ya follamos

W: Él sabe dónde ponértelo, aquí es ella la que se lo coloca entre las piernas, yo sólo observo mientras mis manos acarician sus pechos y masajea su culo.

A: Bueno yo le indico. Así tengo un multiorgasmo.

W: De ella hoy he contado 4. El primero con el aparatito y los otros 3 con mis deditos. Para mi descargar al final me quedo más que satisfecho.

A: Al final te refieres a la penetración y correrte dentro.

W: Sí después de ella. Hoy te he imaginado mientras follaba.

A: Y ¿te has corrido pensando en mi?

W: Si

A: ¿Ella se corre antes y después tú ?

W: Sí, algunas veces yo primero, pero ocasional. Me excita mucho verla correrse y notar la tensión y el arqueo de su cuerpo cuando le viene.

A: Entonces su orgasmo es clitoriano, más que vaginal. Pues es que a mi me pasa igual.

W: Ella necesita apretar las piernas, si no hace presión no se corre.

A: A ver, si estamos en la penetración, él follándome y a la vez me lo hace con los dedos, eso es la leche.

W: Eso pocas veces lo hemos hecho y a mi me encanta que se corra conmigo dentro, es super excitante.

A: O con el aparatito y a la vez la penetración.

W: También pero ella prefiere solo del chisme e inmediatamente después del primer orgasmo seguir con mis dedos, junta tan fuerte las piernas para darle gusto que me aprisiona los dedos con sus muslos y apenas me deja frotar, pero me pone a mil.

A: También cerrar las piernas me gusta. Aunque alguna vez yo le pido que me lo coma.

W: Más quisiera yo que me lo pidiera y poder chupar su coño a gusto.

A: Él me pide que lo hagamos a la vez, pero a mi me gusta disfrutar sola para captar las sensaciones de su boca entre mis piernas y después hacérselo a él. Así disfruto más. Hay mayor goce.

W: Me vale, sí. Mejor que el 69 clásico.

A: ¿Te has puesto palote?

W: Más tiesa no puede estar. ¿y tú, te has mojado?

A: Sí

W: Hoy la preguntaba mientras se la metía si la sentía dentro y sus respuestas me excitaban, porque lo normal es que no diga nada mientras follamos. Te imaginaba a ti.

A: ¿Y te ha gustado?

W: He tenido una corrida sublime. Tenemos que hacer el amor tu y yo.

A: ¿Nosotros? Y ¿cómo?

W: Pensemos. Deseo que te corras conmigo.

A: Pero si estamos a kilómetros de distancia, los dos con pareja y en activo. Eso es una fantasía.

W: Quiero sentir tu gusto, escuchar tus jadeos. Sigo palote.

A: Ya, necesitarías hacerlo de nuevo. Correrte.

W: Contigo. Ahora estamos excitándonos mutuamente.

A: Si eso no afloja, es lo normal. Te la haría sacar y meter varias veces y no te dejaría correrte pronto, a él le distraigo alguna vez para que no se venga y disfrutar más tiempo.

W: Eso es lo que más me gusta, correrme sin que yo quiera hacerlo aún. Es un desparrame total.

A: Te has puesto a mil y eso que no me has probado.

W: Me haría una paja ahora mismo pensando en ti y seguro que me volvería a correr.

A: Sabes, cuando hablo contigo pienso en conversaciones que ya hemos tenido.

W: ¿qué conversaciones? ¿alguna en concreto?

A: Las que hemos tenido como esta de ahora y… Me humedezco.

W: Bueeeno

A: Tus relatos, leerte … Y todo eso.

W: Me encanta que sea así, me da mucha satisfacción.

A: Bueno y eso del hombre tampoco me lo quito de la cabeza.

W: ¿qué del hombre?

A: Que te gustaría hacer un trío con tu mujer y otro hombre pero no sólo para darle gusto a tu mujer, también para ti.

W: Sí, es una fantasía que me gustaría ver cumplida. Ser follado por detrás con mi mujer, me gustaría ver qué se siente, he usado algún dilatador y hasta un vibrador en mi trasero pero no será lo mismo sentir un polla entrando y saliendo.

A: A mi por detrás nunca lo he hecho, no nos ha dado por ahí.

W: bueno pues si alguna vez quieres probar me lo dices, también si quieres hacer un trío con tu marido.

A: Nooo, ni una cosa ni otra, somos muy tradicionales en el sexo, aunque a él le gustaría más frecuencia seguro que nunca hacerlo con otro hombre y a mi con un mango ya tengo suficiente.

W: Aun así, por si cambias de opinión mi ofrecimiento y disposición está.

A: Y a ti ¿te gusta masturbarte?

W: Me agrada bastante, prefiero que me lo hagan, pero solo lo disfruto también. Ya me dijiste que tú también, alguna vez lo haces sola.

A: Sí.

W: A mi me relaja

A: A mi me deja mmmmm

W: ¿Lo has hecho alguna vez con los chorros de la ducha?

A: Nooo, no tenía ni idea que se puede correr una con la ducha.

W: Ella me contó esa experiencia y una vez fui testigo de ello.

A: Qué me estás contando, ¿te quedaste mirando hasta que se corrió?

W: Fui a orinar sentado, como es mi costumbre y mientras lo hacía ella estaba en la cabina sentada en el banco que tiene con los ojos cerrados y dando los chorros de la ducha en posición yet entre sus piernas. Reabría la boca mordiéndose el labio inferior y arqueó su espalda, signo inequívoco que le estaba viendo un orgasmo, apartó el chorro un instante y volvió a apuntar dando un pequeño respingo, hizo la misma maniobra varias veces hasta que abrió los ojos y vio mi cara sonriente mientras me hacía una paja.

A: Al menos no se asustó y se os cortaría la calentura.

W: Para nada, me indicó con una mano que me metiera en la cabina, me quedé de pie mientras ella seguí sentada, me dio un par de chorros en el capullo y se la metió en la boca, no aguanté ni un minuto, en cuanto ella notó que me venía se la sacó de la boca justo en el momento que mi leche salía disparada por la punta de mi poya, no le gusta que me venga en su boca y fue de esas veces que me corrí sin que yo quisiera hacerlo aún, mis piernas se aflojaron tras la corrida.

A: Pues eso tengo que probarlo. Es excitante algo que se sale de lo habitual. No sé si mi ducha tendrá la suficiente presión para llegar al orgasmo.

W: Lo pruebas y luego me lo cuentas. A mi también me sirve de escape masturbarme si me siento presionado o frustrado. También me da gustito un chorro fuerte sobre el capullo.

A: Interesante.

W: Pero necesito excitación, de joven si se me ponía dura, hasta el final. Ahora necesito incentivos, como hablar de ello, por ejemplo, ya se me activa, y saber que te mojas me calienta. ¿ Para correrte usas juguetes ?

A: No lo necesito.

W: Llegas al orgasmo tú sola, ¿con tus dedos?

A: Sí, claro

W: Eso quiero verlooo, me la has puesto dura. No dejaría que te corrieras sola, porque lo haría yo, pero sí es muy excitante saberlo.

A: ¿Qué me harías?

W: Te acariciaría los muslos, muy lentamente acercando mis dedos para ir mojando la punta de mis dedos con tus efluvios y notar cómo resbalan sobre tu rajita de arriba abajo y de abajo arriba, oír el chapoteo, alguna vez meter un dedo y volver a sacarlo, pero frotar tu clítoris cada vez con más ritmo, deseando escuchar tus gemidos y ver como te encorvas

A: Me gusta todo eso.

W: Seguir un ritmo estable hasta que grites de placer.

A: Ufff

W: ¿Conseguiría que te corrieras?

A: Maravilloso

W: Hasta que no te vinieran dos no lo dejaría, hasta que me dijeras basta.

A: A tí qué te gusta para ti.

W: Me gusta que agarres bien la poya con la mano, y la otra acariciar los huevos, que deslices la mano arriba y abajo, que recorra todo el falo sin prisas, mientras haces eso quiero tocarte las tetas y el culo, lo que me quede a mano a mi; me gustaría que me la chuparas, pasar la lengua por la punta y luego meterla en la boca y succiones.

A: Una buena mamada.

W: Sí, y si me dejas descargar mi leche en tu boca sería lo masss.

A: Qué bueno. A mi no me desagrada que descargue en mi boca, me sabe a limpio.

W: ¿Te has mojado?

A: Síiii. Necesitaría una hora a solas contigo por ejemplo.

W: Mejor sin tiempo, pero una hora lo disfrutaríamos seguro

A: Seguro

W: ¿Con penetración o solo nos masturbamos?

A: Podemos ir paso a paso. Es todo en el momento.

W: Claro, dejarnos llevar por los sentidos

A: Nunca pensé que llegaría hasta aquí

W: ¿tienes remordimientos?

A: No exactamente.

W: ¿Te sientes mal por la situación?

A: Tampoco, más bien lo contrario.

W: Bueno, al menos que sea placentero.

A: Como yo hace un momento.

W: ¿Que te has corrido? ¡¿de verdad?!

A: ¡Que siiii!

W: ¡De verdad, qué maravilla!

A: Siiii

W: Cuando te contaba lo que te haría y lo que me gustaría que me hicieras.

A: En esas estaba mientras te leía.

W: Eres fantástica , deliciosa…

A: Bueno supongo que le pasará a todas si te dicen cosas excitantes

W: Diosss

A: Queee

W: Espera que recupero el aliento.

A: ¿También tuuu?

W: Es la primera vez que me dice una mujer que se ha corrido así conmigo, la primera.

A: Tú has sido el primero con el que he hecho esto.

W: Aunque ya me haya quedado a gusto me gustaría que me dieras algún detalle del momento.

A: Bueno. No me has visto pero muevo las piernas, emito gemidos y al final me cierro y me encorvo de excitación.

W: Suficiente, porque me vas a poner a mil de nuevo.

Esa fue una larga conversación con final feliz para los dos un día, hubo otra conversación más breve:

W: Las armas de mujer son más potentes que la bomba atómica.

A: Eres un encanto. Pero no todo es sexo, hay algo más atrayente que eso y tal vez me muera sin averiguarlo. Sí las armas de mujer pueden ser incluso de destrucción masiva, pero no me veo yo ahí.

W: Yo me rindo a tu armamento, me tienes vencido. Por supuesto que no todo es sexo, es más, el sexo llega o debería llegar después de conocerse.

A: A estas alturas ya ni se sabe. Debe haber atracción que lleva a pasión. La vida me dice que viva intensamente.

W: Si es por atracción, toda tú eres un arma y muy peligrosa.

A: Me lo tomaré como un piropo muy original. Cómo te gusta ponerme los dientes largos. Adulador.

W: La mente seduce, el corazón siente y la pasión desborda todo lo anterior.

A: Y estar en el lugar adecuado en el momento justo.

W: Hace años que no lo hacemos en la ducha. Quizás desde aquella vez que te conté.

A: Nosotros en la ducha nunca, no tenemos espacio. En una silla, sobre la mesa, en la encimera.

W: También nosotros, en el monte al aire libre, en el coche.

A: También en el coche. La silla es cómodo, penetrando por detrás, pero nunca anal.

W: Es verdad, la postura de la cuchara da mucho juego. Me estoy calentando.

A: Sí, él por detrás, mientras con la mano me masturba. Todo muy placentero.

W: ¿Tus pezones con el frío se ponen duros?

A: Sí. Y también si me los tocan. Ya estás palote seguro

W: Normal

A: Pues no hablemos para no sentir latidos

W: Me gusta palpitar contigo

A: ¿Estás solo?

W: Sí, en la habitación

A: Yo tendría que ir al baño si seguimos así

W: Lo que me dices me pone másss.

A: Lástima que no podamos poner cámara.

W: Voy a ver fotos tuyas y me voy a desahogar

A: Que bien, sí

W: Me has puesto a tope

A: Y que rico, te estoy imaginando

W: Me la estoy meneando mirándote

A: No escribas y disfruta

W: Diosss mmm

A: Siii

W: Qué gusto me das

A: Me alegro, tú también a mi. Me gusta sentir que disfrutas.

W: Nunca me he podido expresar sobre el sexo con nadie como contigo

A: No es malo, al contrario. Me deseas así, de esas manera. Por aquí he aprendido que el sexo es muy bueno y también importante.

W: Que no falten besos, amor, cariño, abrazos, caricias y sexo, pero ante todo expresar los sentimientos y necesidades

A: Guapooo

W: Masturbarme contigo es lo másss

A: Aunque te parezca mentira me has ayudado mucho en darme cuenta que no estoy tan sola. Hemos saltado algunas líneas rojas, saltar más líneas rojas sería directamente follar.

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