Tengo 3 años de casado y desde el día que conocí a la que en ese entonces yo no sabía que se convertiría en mi suegra me llamó la atención su fuerte carácter, parecía siempre estar molesta por alguna situación, poco a poco me fui convenciendo de su forma de ser y conociéndola mejor resulta ser una persona simpática. La susodicha suegra es un poco parecida a mi esposa (guardando las proporciones de edad y complexión física, mi suegra es un poco gordita) aunque ya no tiene un cuerpo como de la edad de mi esposa tiene sus deliciosas tetas de buen tamaño y un culo para nada despreciable. Mi esposa esta buena, morena, buen culo no tan grande pero firma excelentes tetas, delgada 170 aproximadamente coge como diosa es muy tierna y cariñosa, mente abierta sin tabos.
Las tensiones comenzaron en mi mente desde el inevitable día que por cuestiones económicas de falta de empleo mi esposa y yo, durante el embarazo, tuvimos que ir a vivir un tiempo a la casa de mis suegros fueron alrededor de 4 meses, tiempo en el que mi suegra y yo tuvimos tiempo de más para conocernos. La verdad yo siempre guardé distancia por la cuestión de su carácter que antes mencionaba, no quería tener problemas con ella o que me diera uno de sus típicos regaños o sermones. Como es ese tiempo yo trabajaba por las noches y mi esposa iba a la escuela por las mañanas, mi suegra y yo comenzamos a entrar en una rutina de que algunos días de la semana tomábamos el café juntos por las mañanas ya que mi suegro iba a trabajar todos los días de 7 a 1 de la tarde, lo cual nos daba un margen amplio de tiempo solos en la casa.
No pasaba nada fuera de lo normal, la mayoría del tiempo mientras estábamos juntos en casa yo lo pasaba en el patio fumando o en el cuarto, mi suegra en sus labores cotidianas de señora de la casa, estar con sus mascotas y ver la televisión eras las actividades preferidas por ella ya que cuando todos llegan a casa ella ya no puede hacer nada de eso por eso creo que aprovechaba por las mañanas. Un buen día, como consecuencia del embarazo, el sexo con mi esposa comenzó a escasear, cada vez menos hasta que tuve que
recurrir a la masturbación en el baño o en el cuarto en silencio mientras mi suegra se paseaba por la casa (es una casa pequeña de dos habitaciones) con short cortos y blusas de tirantes, cuando lavaba ropa se mojaban un poco sus pechos lo cual a ella parecía no molestarle cuando por fin me animé a echarle un ojo a mi suegra resulta que me puse caliente de un momento a otro un día que ella estaba lavando y frente a mí se agacho para recoger algo de suelo y pude ver sus enormes tetas deliciosas mojadas, se me empezó a parar el miembro, entonces tuve que hacer una maniobra para disimular y me metí a la habitación en cuanto cerré la puerta me masturbé en silencio no pude aguantar más, eran días difíciles para mí en ese aspecto.
En otra ocasión estando solos en casa me metí a bañar pero olvidé mi toalla para secarme el cuerpo, ya estando mojado me di cuenta y sabía que mi suegra era la única que me podía pasar la toalla así que irremediablemente tuve que pedirle el favor, lo cual realizó de inmediato entonces cuando me pasó la toalla y me tocó la puerta para q abriera me animé y abrí un poco más la puerta de forma que ella me pudiera ver todo desnudo, sorprendentemente ella no hizo ningún gesto de molestia, por el contrario hizo una expresión de sorpresa y le dio un poco de risa mientras cerraba la puerta, acto seguido ya estaba calientísimo a los 5
segundos por lo que me masturbé en la regadera pero esta vez no hice mucho intento por guardar silencio ya que como estaba todo mi cuerpo mojado el sonido hacía evidente lo que yo estaba haciendo con mi miembro, lo cual me excitó más que ella escuchara eso. Terminé y salí con la toalla en la cintura, aun se me notaba mucho bulto, ella estaba en la sala que queda como paso forzoso para llegar a los cuartos, pude ver de “reojo” mientras caminaba al cuarto que me veía todo pero no quería que yo me diera cuenta.
Así nos mantuvimos un tiempo al margen de la situación, respetándonos mutuamente pero ambos sabiendo que nos veíamos mutuamente. De forma intencional yo trataba muy bien a mi esposa frente a mi suegra, la besaba, jugaba con ella la hacía reír una vez hasta le agarré el trasero, todo a vista de mi suegra, dentro de mis locuras yo quería que mi suegra viera mi lado cariñoso y romántico como pareja y amante, quería que tuviera un poco de envidia de su propia hija y quería que pensara que le gustaría que la tratasen así, mi suegro es un tipo de lo más servicial y amable con mi suegra la trata como reina pero siempre pensé que era para sustituir su bajo desempeño como amante en la cama con mi suegra, pensaba en cómo sería una relación sexual entre ellos, la verdad no se notaba nada caliente en su día a día todo era tan común y normal que nadie nunca hablaba de temas de amor o de sexo y menos con mi suegro, perece que nunca fue lo suyo y eso a pesar de que tuvieron tres hijas.
Se llegó el tiempo de cambiarnos de casa, como último acto de provocación hacia mi suegra le pedí que si me dejaba lavar mi ropa yo mismo porque me daba vergüenza, para este punto ella ya me atendía muy bien, me lavaba, hacía el café, me planchaba las camisas para el trabajo etc., me gané su confianza y atención. Le pedí usar la lavadora yo mismo ya que sabía que nuestra convivencia solitaria matutina se limitaría al patio de lavado y la cocina, para llegar al patio de lavado tenías que pasar por la cocina la cual era un pasillo muy
pequeño de dos metros de largo en el que no caben más de una persona, y si esta persona estaba lavando los platos sucios en la cocina forzosamente quien quisiera pasar al patio (donde se encontraba la lavadora) tendría que pedir permiso para pasar o pasarse muy despacio y con cuidado de no empujar de más a la persona que estaba lavando los trastes, que para este caso era mi suegra, ella lavaba los platos mientras yo lavaba, al principio fui amable como de costumbre y le pedía permiso cada vez que pasaba al patio hasta que dijo:
Ella: haaa bueno, que pasadera y pedidera de permiso, tú sólo pásate
Yo: Disculpa suegra jaja no sabía si te iba a incomodar
Pasé una vez de espaldas a ella por lo que nuestros glúteos chocaron mutuamente, noté que ella no se movió para nada, ni dio un paso al costado si hizo intento por adelgazar su cuerpo para que yo pasara, ella casi terminaba de lavar los trastes sucios así que aproveche mi última ida al patio para pasar detrás de ella procurando un roce intencional de nuestros cuerpos, cuando pasé por última vez al patio después del roce ella se encogió el cuerpo para evitar que mi miembro quedará en medio de su culo, aunque el roce de caderas fue inevitable, ella hizo una expresión de sorpresa, un pequeño grito: ‘ahhhay’ seguido de una ligera
risilla como murmuro, en este punto ya no podía evitar la erección, mientras yo estaba en el patio le veía el culo a mi suegra y ella lo sabía, casi pude haberlo grabado pero no me atreví a tanto, así que me descontrolé un poco y pasé de regreso al interior de la casa pasando por la cocina y aplique la misma maniobra para intentar que mi miembro rosara con su trasero lo cual nuevamente para mi sorpresa si pasó, resulta que esta vez mi suegra no se encogió de la cintura para evitarme, se quedó estática como esperando sentir mi miembro, por un segundo mi miembro y el culo de mi suegra conectaron perfectamente por debajo de nuestras ropas, yo reí un poco para mi mismo producto del nerviosismo de rosar el trasero de mi suegra con mi pene medio erecto:
Ella: ¿de qué te ríes jaja?
Yo: Perdón es que ya terminé de usar la lavadora y no estoy tan mojado como usted se moja.
Ambos reímos y cruzamos las miradas por unos instantes.
Ella: haya pues no es que quiera mojarme, cuando meto los brazos a la lavadora mi playera se moja un poco, es normal.
Yo: pero a usted sólo se le moja de arriba jajaja.
Ella: aaay y tu como sabes me andas viendo cada que lavo o qué?
Yo: Perdón jajá es que a veces no puedo evitarlo suegra, es normal como usted dice.
En este punto tenía el pene durísimo, estaba sentado en la sala y mi suegra terminó de lavar los platos y se fue a acostar, desde la sala la veía acostada boca abajo, no podía dejar de mirarle el culo y moría de ganas por chuparle la vagina, pero en lugar de eso me empecé a masturbar por debajo del pants mientras la veía, de un momento a otro ella cambió de posición en la cama y pudo ver a lo lejos desde la cama lo que yo estaba haciendo, me hice el que no había sado nada pero ella me vio como sacaba mi mano debajo de mis pantalones y mi bulto era notorio aun que estuviera sentado, me puse muy rojo por no saber si ella me habría visto o no entonces me paré del sillón con el bulto casi por explotar y me fui al otro cuarto donde no pude evitar masturbarme.
Llegó el día que nos tuvimos que salir de casa de mi suegros, nosotros queríamos nuestro propio espacio así que aprovechamos la oportunidad de rentar la casa de a un lado de mis suegros a un costo muy bajo por tratarse de amigos de la familia de mi esposa. Así es mi suegra no solo sería ahora la suegra que se me antoja si no también mi vecina. La dinámica de los días después de la mudanza era igual, todos conservábamos nuestros horarios de trabajo y escuela.
Nuestro primer encuentro en la nueva casa fue un día por la mañana, yo estaba acostado en la cama recién acababa de despertar cuando sin salir de la cama veo por la ventana que está pagada a la cama y veo a mi suegra con su atuendo clásico recogiendo los desechos de sus perros justo frente a mi recién rentada nueva casa, el movimiento de agacharse hacia que su trasero se hiciera ver más grande y se veían muy bien sus enormes y apetecibles tetas, antes de que ella se diera cuenta de que yo la veía, abrí más la cortina y acostado viéndola comencé a jalármela sin importarme si ella me veía, pasó un minuto y ella volteó a la ventana donde me vio acostado semidesnudo masturbándome a lo cual me vio a los ojos y sonrió de forma burlona y atrevida al mismo tiempo, después se dio la vuelta y se metió a su casa y yo exploté en las sábanas.
Pasaron los meses, cambiaron mi horario del trabajo por las mañanas con lo que la dinámica de convivencia con mi suegra cambió ya que no nos entrabamos más solos durante las mañanas, pasaron varios meses sin ninguna señal o insinuación, en una ocasión cogí tan fuerte a mi esposa que los gritos seguro fueron escuchados en las casas de los lados, seguro mi suegra nos escuchaba mientras lo hacíamos ya que era inevitable apartarse del sonido.
Al día siguiente yo no tenía que trabajar por la mañana y decidí no llevar al bebe a la guardería ya que hacía mucho que no pasábamos una mañana juntos, el bebe se durmió como a las 11 de la mañana para tomar su primer siesta, mi suegra nos había invitado a desayunar a su casa por lo que el niño se quedó dormido en una cama después de tomar un refrigerio, mi suegra se pronto se puso una playera que resaltaba mucho sus tetas, se le veían como nunca con esa playera, no pude apartar la vista de sus pechos por unos momentos hasta que le dije:
Yo: Suegraaa que bonita playera jaja (era una playera con un panda)
Ella: jajaja gracias es la que uso de pijama, ni me he cambiado de ropa
Yo: pues se te ve muy bien esa playera suegra jajá no te la conocía
Ella: Cuando quieras te la presto
Yo: jaja ok préstamela ahorita jajaja
Ella: (riendo) claro que no jajaja está sucia además no se vería bien que tú te pusieras mi ropa, que va a decir José?
Yo: mi suegro ni se ha fijado en tu pijama tan bonita suegra jaja menos se va a fijar en mí
Ella: me voy a dormir un rato, te quedas en tu casa, pórtate bien.
Yo: Con usted siempre me porto bien suegra jaja
Me sonrió y me mira mientras se daba vuelta para entrar a su cuarto y acostarse en su posición favorita (boca abajo con el cuerpo un poco doblado abriendo un poco las piernas). Como de costumbre yo estaba ya duro pero no lo pensé dos veces, tenía que aprovechar la oportunidad, no sabía cuando volveríamos a estar solos así que no fui al baño ni al cuarto a masturbarme, me paré en la puerta de su cuarto viendo todo su cuerpo, sus piernas, comencé a jalar mi miembro, no sin antes verificar que estuviera dormida, tenía tantas ganas de tocarle el culo que muy despacio y sin hacer ruido para no despertarla me acosté a su lado, pensé: si se enoja pues la otra cama está ocupada y solo quería cerrar un momento los ojos, una vez acostado a su lado ya estaba como animal en celo e intenté tocarla sin despertarla, ella estaba dormida, no tan profundamente así que perdí el control por tanta emoción tenía la verga durísima y abracé a mi suegra quedamos en la posición de “cucharita” ella sin despertar me correspondió el abrazo y sin decir nada se pegó a mi cuerpo y yo también puse de mi parte para sentir otra vez ese culo en mi verga, nos quedamos abrazados por varios minutos yo no podía creer lo que estaba pasando ni sabía cuál sería su reacción al despertar y darse cuenta de que era yo quien la abrazaba, en el abrazo mi mano izquierda podía tocar levemente uno de los pechos de mi suegra, yo estaba ya casi explotando por el solo hecho de estar en esa posición.
Pasaron así varios minutos hasta que yo también comencé a quedarme dormido por lo que mi cuerpo se relajó y de un momento a otro ella se dio la vuelta, y me abrazó pero ahora de frente, yo quedé boca arriba totalmente y ella abrazándome y con una pierna sobre mí, mi brazo quedó bajo su cabeza de modo que yo la estaba abrazando por el cuello y ahí fue cuando comencé a tocar su pelo, le acaricié un poco la cabeza e intenté darle un beso en la frente, antes de poder lograr el beso ella se acomodó nuevamente y bajo mucho su brazo con el que me estaba abrazando, no me detuve y le di el beso en la frente sin dejar de abrazarla, ella estaba por despertar, el beso en la frente hizo que ella hiciera un gemido corto pero de notoria satisfacción, acto seguido despertó un poco más y sin abrir los ojos su mano comenzó a buscar mi verga mientras me besaba el cuello una vez que toco mi verga se me salió un gemido como uuff entonces ella reaccionó, abrió los ojos y al verme dio un brinco fuera de la cama, tartamudeó, se dio cuenta de lo que estaba pasando y guardamos silencio durante 5 segundos.
Ella: ¿Qué haces? ¿Por qué estás aquí?
Yo: Perdón me acosté, el niño está abarcando toda la otra cama
Ella: te hubieras ido a tu casa a dormir porque te acostaste con migo, no pensaste en que pasaría si llega alguien? Si llega José? o mi hija?
Me senté en la cama y mi bulto era muy notorio.
Yo: Disculpa suegra no lo pensé, se me hizo fácil y la verdad como teníamos mucho sin convivir pues solo me acosté en el espacio que quedaba, no quería estar solo en mi casa, disculpa de verdad, me quedé dormido y quizá ya dormidos los dos nos abrazamos, no estamos acostumbrados a dormir solos, quizá por eso lo hicimos inconscientes.
Mi suegra con la cara roja y una mano en la boca con un gesto de sorpresa, volvió a la calma y se sentó mientras se arreglaba el pelo diciendo:
Ella: Pues no te ves que estuvieras muy dormido
Miró mi bulto con sarcasmo.
Yo: Perdón jaja es que pues es algo que no puedo controlar, tu eres muy bella y pues el cuerpo reacciona.
Ella: y parece que tú reaccionas ante la menor provocación no?
Yo: Nooo disculpe yo amo a su hija y nunca le haría daño pero no me pida que no mire lo que me gusta (la vi de pies a cabeza deteniéndome en sus tetas).
Ella: Que vergüenza esto está mal jaja pero gracias por decir que te gusto
Yo: (muy nervioso) Gracias a ti por dejarme decírtelo,
Ella: ¿hay algo mal entre tú y mi hija?
Yo aprovechando la situación y para encaminar la plática por donde quería me hice la víctima y puse una cara larga, le dije que desde el parto no habíamos tenido tiempo para nosotros y nuestra intimidad.
Ella: Te entiendo pero buscarme a mi no es correcto, ya tendrán tiempo para hacer sus cosas.
Yo: Entonces si te gusto el abrazo? Jaja (cambiando el tono de la conversación)
Ella: ¿cómo que si me gustó? Estaba dormida, no sentía nada.
Yo: Ni el beso?
Ella: (riendo pero molesta) Siii si sentí eso y otras cosas peor no sabía que eras tú, me dejé llevar, estaba dormida y sentí que ya era de noche.
Yo: ¿otras cosas? Jaja
Mi suegra fue cambiando de a poco su postura ya no estaba sentada en la cama ni alterada ahora estaba acostada y hablándome de forma pícara y relajada.
Ella: Si ya sabes cuales otras cosas, que bueno que reaccioné a tiempo
Yo: sii si no ya no hay forma de parar jaja
Ella: Tú paras demasiado rápido no? Jajaja viéndome la verga piradísima
Yo: Ya te dije que hay cosas que no puedo controlar (ambos reímos) además para tu información no soy tan rápido para eso heee pregúntele a su hija jajaja.
Ella: jajaja sus gritos de la otra noche dicen otra cosa ajaja pues que le estabas haciendo que parecía que estaban matando a alguien jajaja.
Sorprendido por la declaración de mi suegra comencé a pensar con más calma la forma de no perder la oportunidad de sacar algo de provecho, lo que fuera, no podía irme solo con un beso que le di en la frente.
Yo: Y a usted yo no la he escuchado gritar heee? Jajaa que está pasado ahí don José no se está reportando con usted suegra o qué?
Ella: haaay no te estés burlando, él llega muy cansado de trabajar todo el día y ya a nuestra edad el sexo no es prioridad.
Yo: Pues que mal mi suegro heee como puede dejarla sola tanto tiempo yo en su lugar estaría contigo usted todo el día jajaja.
Ella: haay muchas gracias ya no digas esas cosas que me da pena y me pongo nerviosa, José es un buen hombre pero nuestra mejor etapa ya pasó jaja.
Nuestro lenguaje corporal cambió nos fuimos acercando entre nosotros, hasta que ya no hubo más tensión por la sorpresa que le había causado al despertarla de esa manera, como siempre a ella casi se le salen las tetas de la blusa, casi estaba babeando de deseo.
Yo: Antes de abrir los ojos que me ibas a hacer? Porque sentí como que ibas a meterme mano jaja
Ella: Claro que nooo fue un movimiento natural cuando estás acostado abrazado, no tienes tanta suerte chicuelo jejeje.
Fue entonces que me animé a preguntarle.
Yo: Te voy a hacer una pregunta pero no te vayas a enojar y no puedes mentir ok?
Ella: ok está bien pero después yo te hago una pregunta e igual me contestas sincero va? Que me quieres preguntar?
Yo: Cuando fue la última vez que te hicieron sexo oral?
Ella: Se puso más roja de lo que ya estaba y soltó una carcajada nerviosa, porque preguntas eso? Nooo no te voy a decir, no me acuerdo la verdad jajaja
Yo: ¿Me dejarías hacerte el sexo oral? Con todo el respeto que me mereces por supuesto jaja
Ella: Se sorprendió de la pregunta, pelo los ojos y se metió las manos entre las piernas, su cara enrojeció más, noté que sus pezones ya estaban duros, dijo: Hay cómo crees que cosas dices ya mejor vete a tu casa antes de que llegue alguien y nos vean aquí y nosotros hablando de estas cosas, no si está muy bien hacer eso pero tú no, eres mi nuero mi hija es tu esposa
Yo: Ella ni nadie se tienen que enterar nunca, déjame darte la felicidad de un sexo oral bueno, serio y te prometo que no buscaré nada más y será como si nunca hubiera pasado, será nuestro secreto, además que se ve que si tienes ganas suegra (puse mi mano sobre su pierna acariciándola cada vez más cerca de su vagina short corto con dirección a su vagina), ella no dijo nada se quedó mirándome fijamente y mordiéndose todo el labio inferior de la boca.
Ella: No es correcto soy tu suegra y podría ser tu madre en edad es buena oferta pero no puedo aceptar.
Yo: Tal vez sea la última vez que estamos solos aquí en casa, y la verdad es que a mi hija no le gusta tanto que se la chupe (mentira) y tengo muchas ganas, comencé a acercar mi boca a sus piernas, ella no se movía, solo me veía a los ojo, mis manos fueron subiendo a su cintura hasta poder estar en posición de quitarle ese short, al mismo tiempo le di un peso en la pierna arriba de la rodilla a lo cual ella solo hizo un leve gemido y cambió de posición abriendo las piernas lista para darme su vagina en mi boca entonces dijo:
Ella: Juras que no le dirás a nadie y que solo será eso y después de esto nunca se va a repetir algo como esto?
Yo: Te lo juro que es única ocasión Fanny y me llevo esto a la tumba….
Ella ya no dijo nada solo se relajó y echo su cabeza hacia atrás fue entonces que levanto un poco su culo para poder quitarle el short, ya sin short vi por fin mi deseo a unos centímetros de mi boca, traía calzón normal negro, la comencé a tocar como si fuera una flor, muy delicadamente busqué su clítoris con mis dedos sobre su ropa interior y entonces le hice la tanga para un lado y ahí estaba su concha, esperándome ya mojada y lista, no lo pensé dos veces cuando le di un lengüetazo a su clítoris, ella se retorció su cuerpo y soltó un gemido de placer, fui llenándome más de su vagina en mi boca y comencé a meterle los dedos lentamente a su vagina entonces ella dijo:
Ella: No no me los metas (sin oponer mayor resistencia)
Mis dedos terminaron al fondo de su concha e} de un golpe, comencé con el mete saca de dedos mientras me comía su clítoris, con la otra mano comencé a acariciar su pechos que siempre había quería tocar, comenzaba a subir de intensidad sus movimientos de cadera, apretaba más sus hermosos labios vaginales con mis dedos así estuvimos unos 10 minutos cuando comencé a tocar mi pene ella ya estaba muy excitada sus gemidos eran casi gritos, se levantó de la posición en la que estaba y me preguntó:
Ella: que bien lo haces, déjame devolverte el favor va? Solo un poco si no te molesta.
Con la cabeza dije que no y me acostó boca arriba, comenzó a quitarme el pantalón hasta que me saco la verga, me tomo mi pene y comenzó a chuparlo de una forma deliciosa que casi me saca le leche, yo estaba impresionado y muy excitado pero no podía perder tan esperada oportunidad eyaculando prematuramente así que me dejé llevar por el placer y la tomar de la cabeza con su pelo la jalé e hice que toda mi verga entrara en su boca, hasta adentro por unos segundos hasta que ya no aguantó más la respiración y la sacó de su boca, me puse de píe y ella quedó acostada boca abajo en la cama por lo que fui al otro lado de la cama y con un movimiento bruco le pedí que se pusiera boca arriba…
Ella: Que vas a hacer (mientras se tocaba su clítoris) que estás haciendo, ya nos pasamos de la raya, tenemos que parar…
Sin responderle nada, la jale de las piernas y se las abrí, preparándome para meterle la verga…
Ella: Nooo no me la metas eso no dijimos, no.
Yo: Solo un poco, ni modo de quedarnos así a la mitad de todo…
Ella: nooo no me cojas esto está mal (ella tenía los ojos cerrados y se retorcía del placer).
Me puse sus piernas en mi cuerpo y le acerque mi pene a la entrada de su vagina, le comencé a masajear el clítoris con mi cabeza, mientras ella me pedía que no lo hiciera sin ofrecer ninguna resistencia, de un golpe se la metí y ella dio un gemido como quedándose sin aire, ya adentro lo deje unos segundos adentro y comencé a masturbar su clítoris a lo que ella solo se retorció, ya estaba muy excitada y nada nos iba a parar, le pregunte:
Yo: Como quieres que te lo haga?
Ella: Así así, ya me calentaste, cógeme rápido…
Comencé a cogerla primero despacio y fui subiendo el ritmo hasta que se lo estaba haciendo muy duro y ella comenzó a gemir más fuerte, sus gritos eran muy excitantes, después de un tiempo la voltee y sabíamos que seguía el perrito, ella me pidió que no termina, que aguantara pero la verdad es que a mí ya se me salían, por un momento pensé en preguntarle “¿Dónde te los echo?” pero para aguantar más se la saque y le dije que fuéramos a la sala para que se asomara por la ventana por si venia alguien, me miró confundida pero se levantó de la cama y le tomé la mano y nos fuimos caminando muy rápido a la sala en donde ella puso la cara, casi dejándola abierta un poco para poder ver si alguien se aproximaba a la casa, tendríamos tiempo de disimular la situación. Yo la tomé por la cintura y se la volví a meter lentamente, ella volvió a gemir al instante y seguí con el mete y saca por unos minutos todo subió de intensidad comenzamos a sudar la tome por el cuello y la cogí muy fuerte mientras intentaba besarla, así mientras le daba todo con una mano busque su clítoris y la masturbe mientras se la metía ella ya no controlaba sus gritos le tuve que hacer la seña de que bajara el volumen para que no se despertara el bebe, le tomé la pierna se la subí al sillón para que le entrara más profundo después de unos minutos de placer sin igual yo ya no aguantaba ella también estaba más que mojada estábamos por terminar los dos así que me preparé para la embestida final, ella ya solo gemía cada vez que se la metía, no le pregunté y terminé dentro de ella mientras le apretaba sus pechos con ambas manos, se los eché todo adentro.
Ella: haaay nooo ¿por qué terminaste adentro? me hubieras dicho que rico pero, pero me los echaste adentro a ver si Pepe no se da cuenta.
Cuando se la saque se vino un chorro de fluidos que terminaron en el suelo, ella corrió al baño y yo me quedé quieto petrificado sin saber que hacer no podía creer lo que acababa de pasar estuvo buenísimo, para evitar cualquier cosa, me limpié la verga con papel de baño, ella salió del baño y nos quedamos viendo nerviosamente, después nos reímos me acerqué a ella nos abrazamos nos besamos y me fui para mi casa a un lado.