Primero que nada me gustaría presentarme. Soy una chica de 24 años que radica en los Estado Unidos originaria de México. Mis descripciones físicas son las siguientes. Mido 1.60 metros y peso 54 kilos por lo que mas se me caracteriza son por mis grandes pechos de 34D si con una complexión delgada pero pechos grandes, cabello negro y ondulado y tez blanca
Mis experiencias sexuales empezaron desde muy temprana edad. Yo siempre he tenido fantasías sodomías y creo que por tal razón me han ayudado a ser una mujer a la que le gusta experimentar con su sexualidad. Pero esto era solo una presentación de mi persona exterior pero ahora hablare de la persona que soy sexualmente.
Mi primer experiencia anal con mi pareja fue ase dos años, aunque yo ya había experimentado con la introducción de mis dedos al principio y luego objetos. Desde que empecé a mirar páginas en el Internet de fotos del sexo anal me excitaron mucho. Se me hacia algo prohibido y a la vez humillante pero me ponían a 1,000 por hora. Solamente la idea de estar a la disposición de un hombre de esa manera fue lo que me ahorrillo a experimentar esta forma de sexo.
Mi pareja sabia donde tocarme para excitarme pero un día le dirigí la mano un poquito mas para atrás para que tocara mi culito y eso fue el empiezo de todo… Yo sentía una sensación tan extraña pero tan excitante de sentir como mi culito se iba acostumbrando a tener su dedo dentro de mi y como iba dilatándolo. El me pregunto que si quería coger por atrás y yo accedí. No sabía a lo que me estaba metiendo. No íbamos preparados así que lo que el hizo fue primero con su lengua lamió mi culito y lo dejo muy mojadito. Después me pidió que se la lamiera y se la dejara bien mojada igual. Después me dijo… «voltéate mamita que ahora si te voy a dar por ese culito tan apretadito.»… Wow solo de escuchar esas palabras me pusieron mas lista. Me acosté boca abajo y con las nalgas elevadas aun un poco nerviosa pero con ansias.
No lo niego me que me dolía mientras el metía la puntita de su gran verga. Pero lo hizo con tanta delicadeza que mi culito se iba acostumbrando poco a poco. Cuando la tenía ya a la mitad, fue ahí donde empezó la acción.
«ahora si prepárate que te la voy a hacer que te la acabes todita» el me decía mientras agarraba mis caderas con fuerza.
Yo ya no sabia si gritar de dolor o placer pero sentía que me abrían mi culito en dos pero yo le dije… «vamos dámela toda que ahora si quiero que me cojas bien rico papi» de ahí el tomo de mis cabellos y me jalo asía atrás y empezó a cabalgarme mientras me decía. «te gusta verdad mamita»… «verdad que te gusta esta verga zorrita»… yo ya no aguantaba el dolor de sentir como su verga se metía y salía con tanta rapidez y mientras el jalaba de mis cabellos. Siempre nuestras experiencias sexuales han sido rudas así que también me dio unas cuantas nalgadas. El me seguía dando y diciéndome que si me gustaba que me rompiera mi culito. Yo tan excitada le pedía que me diera mas duro.
Después de un rato el ya estaba apunto de explotar. Pero nos paramos un momento por que no sabíamos que hacer. Normalmente cuando estamos en la acción antes de terminar, yo se la mamo hasta que termine en mis labios y toda su leche se escurra en mi cara. Pero esta vez no era apropiado así que el término dentro de mí. Sentí como su leche me llenaba todo mi interior. Después de un rato fui al baño a darme una ducha y mientras me lavaba me ponía creer lo que acababa de hacer y con las ganas que tenía de repetirlo. No lo niego fue algo doloroso pero es una práctica que mi pareja y yo no hemos dejado de hacer.
Esta experiencia fue solo la primera que abrió una nueva puerta a nuestra sexualidad. Pero los relatos que vienen están mas excitantes. Espero y sean de su agrado. Recuerden que estas historias son reales entre mi pareja y yo.