Mi esposo desde que lo conoci siempre fue un hombre muy tranquilo y aveces hasta desesperadamente pasivo y quedado, es de los que aveces prefiere quedarse callado para evitar una confrontacion aun cuando algo incorrecto este pasando enfrente de sus ojos.
Aun asi el es un hombre muy responsable y de buenos sentimientos. Yo me enamore de el y de sus cualidades como un hombre para formar una familia y despues de ano y medio de noviazgo decidimos casarnos.
Por su parte mi hermana mayor no es casada pero hace cinco anos vive con su novio Javier. Javier desde que lo conoci era todo lo contrario a lo que era mi esposo, era divertido, hablador, bromista y sobre todo era un coqueto y miron de primera.
Desde que Javier y yo nos conocimos yo descubri inmediatamente su caracter picaro porque lo agarre unas cuantas veces mirandome el escote de la blusa o las piernas. Yo no decia nada porque al principio eso era todo lo que Javier hacia y yo lo tomaba como que el era hombre al fin y al cabo y lo dejaba pasar por alto.
Mi hermana es sumamente celosa pero Javier muchas veces se aprovechaba de cualquier situacion cuando mi hermana no estaba presente y sabiendo del caracter pasivo de mi esposo aprovechaba para bromearme, piropearme y hasta aveces me saludaba agarrandome por la cintura y me decia en la mejilla «hola guapa» con un beso.
Una noche que habiamos salido en grupo a una discoteca Javier me saco a bailar una salsa justo cuando mi hermana habia salido afuera a dejar a una amiga que habia venido con nosotros. Javier me llevo al medio de la pista de baile, me agarro bien por toda la cintura y me pego todo el cuepo junto al de el, todo esto enfrente de mi esposo.
Pero eso no fue todo, despues de un rato de bailar como Javier estaba algo tomado, me empezo a bajar la mano por la espalda y llego casi a tocarme el trasero. Yo me empeze a sentir un poco incomoda y el se me acerco a la oreja a decirme «que rico te mueves» o «dejame apretarte mas» entre otras cosas. Yo no sabia ni como reaccionar, no queria armar un escandalo y arruinarle la noche a mi hermana, pero sobre todo estaba esperando que mi esposo hiciera ago, el solo se quedo sentado en la mesa mirando lo que sucedia y no hizo nada hasta que mi hermana regreso y Javier inmediatamente me saco la mano del trasero.
Este y otros incidentes habian provocado que con el pasar de los meses se formara una tension y una coqueteria continua de Javier hacia mi. Por supuesto el nunca hacia nada enfrente de mi hermana porque ella lo hubiera matado, pero al mismo tiempo el no se reprimia en lo mas minimo en coquetearme y hasta aveces tocarme enfrete de mi esposo.
Yo la verdad estaba rabiosa con la indiferencia de mi esposo en relacion a toda esta situacion, queria que el dijera algo, que lo pusiera a Javier en su lugar, pero el siempre me contestaba que no queria provocar problemas y que Javier solo estaba «bromeando»
En mi desespero por querer provocar una reaccion de mi esposo decidi seguirle la corriente a Javier y ver hasta donde podia aguantar mi esposo con su pasividad, hasta donde podia permitir mi esposo que Javier me manoseara enfrente de el.
Un Jueves por la noche mi hermana y Javier iban a venir a visitar a mi casa, asi que decidi poner mi plan en marcha, me puse unos shorcitos de jean super cortitos y zandalias abiertas, inclusive cuando mi hermana llego me pregunto sarcasticamente porque me habia vestido como «puta»; por su parte Javier disimuladamente me miraba cada vez que podia detras de mi hermana.
En un momento de la noche mi hermana recibio una llamada a su celular de un asunto de trabajo asi que tuvo que salir afuera por un rato. Javier no dejo pasar esta oportunidad, apenas mi hermana salio de la casa el me tomo por la cintura y me jalo para sentarme al lado de el en el sillon de la sala. Javier sin dejar de soltarme por la cintura me empezo a susurrar cosas en la oreja, yo estaba esperando que mi esposo hiciera algo, que dijera algo pero solo se reia como tomando en gracia lo que Javier hacia.
Javier por supuesto estaba todo alborotado mirandome los shorcitors cortitos que tenia puestos, y en un momento que ni me di cuenta y con el mayor descaro del mundo puso su mano encima de mi pierna, con la mano abierta me agarro el muslo. Mi esposo estaba sentado en un sillon casi al frente de nosotros.
Mi esposo ni siquiera volteo a mirar lo que estaba pasando, pero yo sabia bien que el se habia dado cuenta que la mano de Javier estaba en toda mi pierna. Lo unico que hizo mi esposo en ese momento, para evitar una maldita confrontacion fue tomar unos vasos que habian en la mesa de centro de la sala, ponerse de pie e irse caminando hacia la cocina, nos dejo solos a mi y a Javier en la sala.
Yo me quede en completo estado de incredulidad, en menos de 5 segundos toda la imagen de hombre que una mujer debe tener de su esposo se me desmorono completamente. Mi esposo estaba permitiendo que otro hombre viniera y me manoseara a mi que era su mujer enfrente de el.
Por supuesto que Javier al darse cuenta de toda esta situacion no perdio la oportunidad. Me manoseo las piernas y los muslos como quizo, no solo eso sino que me agarro los senos por encima de la blusa mientras que completamente alterado me decia en la oreja que yo estaba buena, que mi esposo no me sabia cojer y que el me iba a ensenar como cojerse a unas piernas como las mias.
En el medio de mi decepcion no me quedo otra cosa que pensar que quizas lo que Javier me estaba diciendo era cierto, quizas mi esposo no era hombre suficiente para mi y quizas Javier si era el hombre, fuerte y con experiencia que me supiera poseer y hacerme sentir una mujer completa en sus brazos.
Cuando mi hermana entro a la casa todo volvio a la normalidad otra vez, despues de una hora mas mi hermana y Javier se fueron de la casa y mi esposo y yo nos quedamos solos. Yo no tenia nada que decirle, ni siquiera queria mirarlo, nunca me hubiera imaginado que su cobardia de mi esposo llegara a ese punto.
Yo estaba tan dolida con mi esposo que solo queria herirlo de la misma manera a el, unos dias mas tardes lo llame a Javier al trabajo y lo cite para que se encontrara conmigo en mi casa. Esa tarde me vesti lo mas provocativa que pude, descalza, con una faldita cortita y una blusa sin brasiere. Apenas Javier entro a mi casa yo le dije «acaso esto no es lo que querias?», el no perdio el tiempo, empezo a besarme, me tiro contra el sillon, me bajo el calzon y me COJIO como hacia anos no me habian cojido.
Al acostarme con Javier esa tarde me di cuenta de la inmensa diferencia que habia entre el y mi esposo inclusive en la forma de hacer el amor. Mi esposo es un amante pasivo mientras que Javier es de los hombres que les gusta tomar control, le gusta hablar sucio mientras lo hace y sobre todo lo gusta pedir cosas para que una haga. A mi me encanto, hacia tiempo que no sentia a un hombre con esa seguridad haciendo lo que queria de mi.
Lo hicimos por casi toda la tarde hasta que nos dimos cuenta que eran las 5 de la tarde. Mi esposo casi siempre llega del trabajo a las 5.30. Javier me pregunto si yo queria que el se fuera y yo le respondi que no, que queria que nos sentaramos en la sala a ver television y lo esperaramos a que llegara mi esposo. Javier me miro como si yo estuviera loca pero acepto. Se subio los pantalones, se cerro la camisa y nos sentamos juntos a ver television en el sillon de la sala.
Yo estaba vestida de lo mas puta, descalza y con una faldita cortisima, cualquier hombre que hubiera visto vestida asi a su esposa y mas aun sola y con otro hombre en la casa hubiera armado la tercera guerra mundial, pero tal y como yo lo habia pensado mi esposo llego a la casa, me saludo a mi, lo saludo a Javier de mano y no hizo el menor comentario de que haciamos los dos solos en la casa o porque estaba vestida asi. Hablo tonterias con nosotros por 5 minutos y luego se disculpo y se fue al segundo piso de la casa dejandonos otra vez solos a mi y a Javier en la sala.
Esa noche aun despues de que se fue Javier de la casa yo no entre a nuestra habitacion donde estaba mi esposo, me quede pensando por 5 horas en la terraza de la casa.
A la semana siguiente otra vez Javier vino a la casa y otra vez nos acostamos. Esta vez lo hicimos encima de la mesa del comedor entre otros lugares de la casa. Tengo que admitir que aun cuando todo esto empezo como algo en contra de mi esposo, ahora me ha empezado a gustar Javier como hombre, me gusta la forma como sabe poseerme, como me ordena cosas mientras lo hacemo. Que puedo decir, me hace sentir una mujer completa de pies a cabeza.
Estoy muy conciente que estoy en medio de una situacion increiblemente equivocada por todos los sentidos que una lo pueda analizar. Las cosas sucedieron tal y como las conte y ahora no tengo idea de como sentirme o como «deberia» sentirme.
Mi esposo me ha decepcionado de una forma increible como hombre pero sigo viendo todas las cualidades que vi en el cuando nos casamos, Javier es un buen amante pero definitivamente no es un hombre con las cualidades para formar una familia, estoy segura que esas es la razon por la cual en 5 anos de relacion mi hermana y el nunca se han casado.
Me gustaria poder escuchar opiniones de personas ajenas a esta situacion para saber si estoy loca, condundida o soy completamente culpable de todo lo que me esta sucediendo. Por adelantado le agradesco sus palabras.