Hola chicos soy Andrea, esta vez les traigo algo diferente, espero que lo disfruten mucho.
Me encontraba en casa preparándome para uno de mis paseos nocturnos habituales, para esa noche me puse solamente una camiseta delgada con tirantes que me dejan un escote muy pronunciado y para abajo unos leggings deportivos corto el cual me queda muy ajustado a los muslos, lo prepare haciéndole un agujero en la parte de mi hoyito porque decidí salir con mi plug de colita de zorra, espere que fueran las 2 am y salí lentamente de mi casa.
Para esa noche me había propuesto caminar un poco fuera del terreno, lo había intentado un par de veces, pero siempre tapada con un gran abrigo y por un par de calles solamente, esta vez saldría solamente vestida así, pero con mi antifaz y mi peluca, salí de casa lentamente, mirando que no hubiera nadie, una vez afuera me acerque a la reja principal, me apoye en ella para ver mejor, vi que pasaban pocos autos y no pude ver a ninguna persona, entonces muy lentamente comencé a abrir la puerta de la raja para salir, mire a todos lados y termine saliendo a la calle, me sentí muy nerviosa, mi corazón palpitaba por la situación y por la posibilidad de que alguien me viera vestida así y con mi colita de zorra.
Empecé a caminar lentamente mirando a las ventanas de las casas, algunas aún con luz, mi corazón estaba a mil y mi cara estaba muy caliente, disfrutaba mucho de mi paseo nocturno por la calle, el viento rozaba mi piel descubierta y mis pezones se pusieron muy duros tanto que se marcaban a través de mi polera, continúe caminando lentamente mientras meneaba mi culito como una puta buscando algún cliente.
Al avanzar un par de calles, estando cerca de una parada de autobús vi como a lo lejos se acercaba una persona hacia mí, al acercarnos más pude verlo mejor era un hombre joven un poco más alto que yo, se me ocurrió provocarlo un poco, cuando ya estaba muy cerca deje caer mis llaves a un lado de la acera, me di la vuelta y me incline levantándole todo el culo para que viera mi colita, empecé a mover mis nalgas lentamente para él, pero solo paso cerca de mí sin detenerse, lo vi pasar por mi lado, entonces rápidamente le dije.
-«Ey disculpa, ¿me podrías ayudar?».
Me puse en 4 rápidamente, él se volteó y me miró con intriga, yo le dije.
-«Se me cayeron mis llaves, ¿podrías ayudarme a recogerlas, por favor?».
Él tímidamente se acercó a mí sin decirme nada, yo me acomodé en 4 frente a él, lo miré por sobre mi hombro y le dije.
-«Solo necesito que me empujes un poco para poder alcanzar mis llaves».
Seguí fingiendo intentar conseguir mis llaves moviéndole el culo eróticamente, sentí sus manos tocarme bajo las nalgas, me tome mi tiempo para dejarlo disfrutar de la vista de mi cuerpo, finalmente tome mis llaves y me moví hacia atrás, el movimiento rápido provoco que él pusiera una de sus manos en mi culo, me puse de pie y le di la vuelta para verlo, él estaba rojo, pero su mirada denotaba algo de nerviosismo y timidez, yo le dije sonriéndole.
-«Muchas gracias por ayudarme, eres muy lindo y amable, ¿cómo te llamas?».
Él me dijo tímidamente.
-«De nada… Fue un placer, me llamo Juanjo».
Él se dio la vuelta y empezó a caminar, yo no quería perder la oportunidad de que alguien me tocara en plena calle, así que lo tomé del brazo rápidamente y le dije.
-«Espera por favor, déjame agradecerte, Juanjo».
Él me miró sorprendido, entonces yo le dije.
-«Por haberme ayudado, te dejaré tocarme todo lo que tú quieras».
Él me miró confundido y me preguntó.
-«¿A qué te refieres con tocarte?».
Yo le sonreí pícaramente, tomé sus manos y las puse en mis tetas, entonces le dije con un tono erótico.
-«A esto querido Juanjo, puedes tocarme donde tú quieras».
Él miró a todos lados antes de hacer ningún movimiento, empezó a sobarme las tetas, apretándolas suavemente, yo empecé a calentarme porque me estaba tocando en plena calle donde cualquiera podía vernos, Juanjo con sus movimientos provoco que mis tetas se salieran un poco de mi camiseta, así que yo me baje los tirantes por los hombros y deje que mis tetas quedaran desnudas para él, el continuo apretándolas muy rico, apretó mis pezones con fuerza, yo gemí un poco suavemente, mire a los lados para ver si venía alguien, por suerte no vi a nada.
Juanjo me tomo por las caderas y me dio la vuelta con fuerza, debo admitir que parecía tener mucha fuerza, empezó a frotarme el culo con sus manos, recorrió mis piernas y mis nalgas en su totalidad, yo me moví un poco, para acercarnos a la parada de autobús, me subí en la banca de rodillas y le deje mi culo a su disposición, siguió manoseándome muy rico, de pronto sentí como Juanjo empezó a bajarme el leggins hasta las rodillas yo levante mis rodillas un poco para que me lo sacara del todo, me lo quito y dejo mi culo desnudo para él.
Continuo manoseándome las nalgas, de pronto sentí algo húmedo en mi conchita, me gire y lo vi comiéndome la conchita con pasión, su lengua me recorrió completamente, me hizo estremecer completamente, yo me deje llevar y deje que me comiera todo, sentí como quería sacarme el plug de zorrita del culo, yo con una de mis manos me abrí un poco las nalgas para facilitárselo, finalmente me lo saco lentamente, escupiéndome el hoyito para lubricármelo, al sacarlo lo dejo a un lado y sentí como su lengua entro totalmente en mi culo saboreándolo en su totalidad, yo me estremecí nuevamente y gemí «aaa… Mmm… Aaa..».
Juanjo me comió el culo suavemente, empezó a meterme los dedos en la conchita masajeándomela por fuera, yo estaba disfrutando mucho del momento, entonces escuche a gente acercarse a nosotros.
Yo me asuste y trate de bajarme de la banca, pero Juanjo me continuó sujetando con fuerza sin dejarme bajar y continuó comiéndome el culo, la gente cada vez estaba cerca, logre bajar de la banca, pero quede en 4 sujetando mis manos en ella, la comida de culo y los masajes en mi concha ya me estaban provocando placeres muy grandes, sentí como estaba pronto a tener un orgasmo, la gente paso por frente nuestro y yo simplemente agache la cabeza para no mirarlos, me gire para decirle a Juanjo.
-«Espera… Por favor… Mmm… Para… Nos… verán».
Él sacó su lengua de mi hoyito y sus dedos de mi conchita, yo estaba jadeando mucho, era imposible que las personas que pasaron no me hubieran visto, Juanjo se me acercó al oído y me dijo susurrándome.
-«Lo siento, pero ahora te daré todo lo que me pediste, putita».
Yo me queda desconcertada, Juanjo me metió dos dedos en el culo y empezó a follármelo, yo me empecé a retorcer y quise librarme de él, tomo mis leggins y me los puso dentro de la boca, tomo mis brazos y me los puso detrás de la espalda, yo caí con mi cara directo al suelo, Juanjo tenía mucha fuerza y con sus dedos no pude moverme con libertad, me estaba forzando a sentir placer, pero yo misma lo había provocado, el saco sus dedos y sin soltar mis brazos me continuó comiendo el culo con dureza, su lengua se sentía muy adentro, con su mano libre empezó a meterme los dedos en mi conchita, yo sentí demasiado rico, el orgasmo era inevitable.
Juanjo me estaba provocando un orgasmo muy duro en plena calle, sentí como el orgasmo me llego con fuerza, mi cuerpo tembló entero y me retorcí muchísimo mis piernas poco a poco cedieron y quede tendida en el suelo, Juanjo se separó de mí, me dio la vuelta y me sentó apoyando mi cabeza en la banca, se me acerco de nuevo y me dijo.
-«No hemos terminado putita, ahora me toca llenarte la boca».
Me saco el leggins de la boca, también me quito el antifaz y la peluca tirándolas a un lado, yo solté saliva y jadeaba por el orgasmo tan rico que me había provocado, no pude resistirme a sus intenciones, saco su pene y me lo metió a la boca con fuerza, era grande y me lleno completamente la boca, solo pude dejar que me follara la boca, la abrí lo más que pude para que no me lastimara, su pene me provoco arcadas en varias ocasiones, me ahogaba mucho, me follo la boca con dureza, cuando por fin me lo saco yo le pedí casi rogándole.
-«Por por favor… Déjame… Me dolió mucho…».
Él sin decirme nada me dio la vuelta, apoyo mis brazos en la banca y me puso en cuatro, yo me giré para verlo y lo vi posicionando su pene directo sobre mi hoyito, yo empecé a moverme para que no me penetrara, él me tomó la cintura con sus dos manos, su fuerza me impidió seguir moviéndome, yo aún estaba sensible por el orgasmo y no tenía muchas fuerzas, me metió la punta y yo solo pude gemir de dolor «ayy… Espera… Mas… Despacio», él me saco la punta, me lleno de saliva el culo y me metió dos dedos, me lubrico bien el culo y volvió a meterlo, en esta segunda ocasión su pene entro mucho más fácil y me provoco sensaciones muy ricas en mi hoyito, aquel chico me estaba violando el culo en plena calle y yo comenzaba a disfrutarlo como una puta cualquiera.
Juanjo empezó a follarme el culo lentamente, pude sentir cada movimiento de su miembro mientras llenaba mi hoyito, las sensaciones eran muy ricas y no podía resistirme a él, instintivamente apretaba mi hoyito cada vez que él lo metía hasta el fondo, empezó a darme más duro yo me aferre a la banca como pude, las sensaciones de sus embestidas me dieron mucho placer, a los minutos de estar follándome sentí como empezó a acelerar más y aplicar más fuerza en cada embestida, mis nalgas chocaban con su pelvis con dureza, mi cuerpo temblaba entero, de pronto sentí algo caliente que inundo mi hoyito, él empezó a jadear de placer y empezó a bajar el ritmo.
Supe entonces que se había corrido dentro de mi culo con abundancia, su pene palpitaba mucho y con mi culo solo lo apreté para sacarle hasta la última gota de leche, el continuo sus movimientos muy lentamente hasta que finalmente se detuvo y saco su pene, su leche empezó a salir de mi hoyito lentamente, yo continúe jadeando con mi cara apoyada en mis brazos, pensé que sería todo, que después de eso él me dejaría libre y yo podría volver pronto a casa, sentí que los labios de mi conchita se abrieron bastante y algo caliente empezó a recorrerla totalmente, yo me gire nuevamente y vi al chico comiéndome totalmente la conchita, yo no podía creer que él aún seguía follándome, era insaciable y yo no podía resistirme a sus lamidas tan ricas, luego de unos minutos él se separó de mí, y rápidamente sentí como algo duro entraba en mi conchita, me gire con sorpresa y él estaba con su pene follándome otra vez, yo le dije.
-«Por favor para nos verán por favor déjame… Mmm… Ya me follaste el culo…».
Él continuó dándome embestidas, su pene caliente me llenaba bastante, se empezó cada vez a sentir más rico, él me tomó del pelo y me levantó con delicadeza la cabeza, entonces me dijo.
-«Te voy a seguir follando hasta que quedes satisfecha putita, además no me digas que no te gusta, tú me provocaste y yo solo te estoy dando lo que me pediste».
Yo totalmente entregada, le respondí.
-«Por favor no… Aaa… No mas… Aaa… Mmm… Ufff… Para no quiero mas…».
Sus embestidas me estaban volviendo loca, empecé a gemir mientras me resistía para no hacerlo, «aaaa… Mmmm… mmm… Aaaa», de pronto escuché una voz a nuestro lado.
-«Vaya mira qué tenemos aquí, parece que no se pudieron aguantar».
Yo miré cómo pude y vi que eran 4 hombres, vestidos con ropa de trabajo, algo así como electricistas o constructores, traté de esconder mi cara y cerré mis ojos, me estaban viendo ser follada en plena calle, uno de los hombres dijo en tono jocoso.
-«Que rica esta tu novia joven, se nota que le encanta que le des duro».
El sin dejar de follarme, les dijo.
-«Esta putita no es mi novia, solo es una zorrita que quería que la follara en plena calle, pero creo que ya está satisfecha».
Luego de decir eso, él sacó su pene de mi conchita, me tomó de la cintura y me puso de pie mirando a los hombres, yo no podía creer la situación, Juanjo me preguntó.
-«¿Quieres más o ya tuviste suficiente putita?».
Yo me sentí totalmente a su merced, la follada que me estaba dando me dejó muy excitada y sensible, mi conchita pedía más placer, yo había provocado esa situación y estaba recibiendo mi recompensa de la manera más guarra y sucia de todas, le respondí tímidamente.
-«Aun no tengo quiero mas follame mas por favor dame hasta que me desmaye del placer…».
Él solo esbozó una sonrisa, me dio un empujón hacia los hombres, unos de ellos me sujeto de los hombros, yo quede apoyada en su pecho, Juanjo me tomo de la cintura, me acomodo y me volvió a meter el pene por el culo, yo gemí «aaaa… Mmm… Aaa», empezó a follarme el culo agresivamente yo solo me aferré al hombre que me sujetaba, al estar de pie mis piernas temblaban mucho más, Juanjo me follo muy rico el culo y mientras lo hacía masajeaba mi clítoris, sentí como me llenaba el culo de leche otra vez a la vez que me llegaba un orgasmo muy intenso, gemí de placer «aaa… Siii… Mmmm… Siii… No pares… No dejes de follarme… El culo… Que ricooo se sienteee…», se corrió nuevamente, llenándome el culo de su leche, saco su pene yo no podía sostenerme en mis piernas, los hombres me sujetaron entre todos agarrándome de las tetas y del culo, yo estaba muy exhausta y mi mente estaba totalmente en blanco, solo escuche que Juanjo les dijo a los hombres.
-«Parece que la putita aún no está satisfecha, porque no la ayudan señores, es toda suya».
Todos comenzaron a manosearme muy intensamente, yo no podía reaccionar para nada, mi mente se nubló y sentí que perdí un poco el conocimiento, solo sentí levemente como aquellos hombres me manosearon entera, me follaron la conchita y el culo, me tumbaron en la banca para follarme y me pusieron en distintas posiciones, solo para descargar toda su leche sobre mí, sin darme cuenta me habían cubierto de su semen, yo no volví en mí sino hasta un rato después de que los hombres me usaron y se fueron, Juanjo me dijo.
-«Parece que te gustó mucho lo que te dieron, te aferraste a ellos como una perra en celo y gemiste como loca, ahora me correré en tu boca para también irme a mi casa».
Él acercó su pene a mi boca y comenzó a follarla nuevamente, me provoco arcadas y ahogos contantes, finalmente me tiro su corrida en la boca, yo me la trague toda como pude, el continuó moviendo su pene dentro de mi boca para limpiarlo, yo le pase la lengua por todos lados, finalmente lo saco y me dijo.
-«Fue un placer ayudarte querida, espero que te gustara la noche».
Se fue dejándome desnuda y cubierta de semen, yo a los 30 minutos me sentí con algo de energía para volver, pero mientras tanto pasaron autos viéndome, sentada desnuda con las piernas abiertas cubierta de leche de desconocidos, al estar ya más recuperada, me vestí de nuevo, tomé mi cola y volví a casa rápidamente para ducharme, la experiencia se había salido totalmente de control y me habían follado por todos lados, pero sin duda me había encantado ser tomada de esa forma por aquel joven.
Chicos, acá termina esta fantasía, déjenme contarles que esta historia, la escribí inspirada en lo que me escribió un lector que se autodenominó Juanjo, él me expresó su fantasía conmigo y a mí me gustó mucho así que quise transfórmala en una pequeña historia imaginándome y dándole un contexto como si fuera una experiencia real, espero que les guste, y si quieren mandarme sus fantasías o algo parecido, me encantaría leerlas para escribir sus fantasías más eróticas conmigo, les mando un beso a todos.