En el gimnasio donde voy conocí a Eliza, todos de cariño la conocen como Isa, es muy alegre de pelo chino, unas tetas grandes y un trasero de igual magnitud.
Al principio ella mantenía una distancia conmigo tratándome muy profesional, pero, eso cambio cuando descubrió la infidelidad de su esposo, ella no dijo nada pero estaba pensando como desquitarse,
Yo la veía pues con los mallones que tenía se transparentaba su tanga, ella notaba que la miraba, y me pidió ayuda para el peso que tenía, mi sorpresa fue que al bajar y subir ella tocará mi pene con su culo, y ahí fue cuando me lo dijo:
-Tú me vas a ayudar
-claro, si puedo lo hago
Ella tomó mi mano y entramos a un cuarto que parecía una bodega vieja, pues estaba todo el equipo roto o en reparación, se amarró el cabello y me explico todo, saco mi pene y comenzó a besarlo, primero lento después con su lengua, metía y sacaba mi verga de su boca, el sonido de ella mamándola era increíble, yo comencé a venirme y ella lejos de apartarme chupo más fuerte y se comió una gran parte de mi semen, abrió la boca y me dijo:
-no pude con todo -lo puso en su mano, y después lo trago
Dejando una cantidad considerable en sus labios.
Salimos juntos, al salir le dije:
-para la próxima me voy a venir dentro de ti, prepárate
-ya me desquite no hay próxima.
La vi y le sonreí, -solo prepárate.
Al salir estaba su marido con ella, se acercó y lo beso, él se tocó los labios y ella le dijo que era su nuevo bálsamo, el solo dijo sabe horrible.
Ella solo le dije es el precio de ser bonita y volvió a besarlo.
La siguiente semana al entrar la vi, agachada con las nalgas hacia arriba, pase y toque su trasero, dándole una nalgada que casi la tira, le dije que ese día me la cogería, ella pareció gustarle la idea, aunque no lo dijo, a media rutina me pide ayuda para que lleve una de las máquinas al área roja, el cuarto donde días atrás me la había chupado.
Deje la máquina y la tomé por la espalda, ella se resistió al principio ero después me dijo que solo la chuparía de nuevo, bajo y me la chupo como nunca, pero yo resistía en venirme.
Ella se levantó para marcharse cuando la detuve y puse mi mano en su vagina.
-porque estás tan mojada.
-es sudor del ejercicio.
Baje su pantalón y traía una tanga negra, la hice a un lado y metí mis dedos, ella solo soltó un gemido.
Puse mi verga a la entrada de su vagina y empecé a meterlo dentro.
Ella solo gemía y decía que despacio, que era del mismo tamaño que la de su marido pero era más gruesa la mía.
Yo empuje toda de un solo golpe y le dije:
-así de mojada como estás y entro muy fácil.
Le temblaban las piernas al parecer se corrió en cuanto la metí, empecé a meter y sacarla con fuerza, y ella solo contenía sus gemidos, se volteó y me dijo siéntate y se subió, comenzó a mirarme, y a decirme que ella no era una puta, que iba a denunciarme, que me corriera dentro de ella para tener pruebas, la levante y cumplí su deseo, me corrí tanto dentro de ella que cuando la saque un mar de semen salía de su vagina, la cual no podía ser contenida por su tenga, la baje y le dije:
-límpiamela con esa boquita que no es de una puta
Ella solo obedeció y comenzó a chuparla, me corrí de nuevo en su boca.
-la próxima vez te romperé el culo.
Saque mi teléfono y puse mi verga aun lado de su cara y le tome una foto, ella solo sonreía.
Cuando salimos nos reportaron que habían tenido sexo en el almacén que si sabíamos algo avisáramos.
Ella me miró y dijo yo estuve todo el tiempo con él, así que nosotros no hemos sido, me sonrió y se fue.
-Espero con ansias la próxima -me dijo.