Hola, luego de un par de años, vuelvo a escribir. Espero les guste.
Cuando Eduardo Gimenez llegó a su casa, dejó un maletín en un sofá, se quitó el traje, lo colgó, puso la ropa para lavar y se dio una ducha. Se puso un jogging, una remera, zapatillas y fue a prepararse un café y un whisky.